La regidora provincial de Abancay, Mónica Giráldez Llerena, ha sido crítica con la actual gestión municipal, señalando en entrevista a Voces del Sur de radio Titanka (Apurímac) que las decisiones no se están tomando con un análisis adecuado. Además, el control de la administración se encuentra en manos de una mayoría que bloquea cualquier intento de fiscalización.
Desde el inicio de su mandato, Giráldez le dijo a las actuales autoridades: “Voy a apoyar todo lo que sea en beneficio de la población, pero lo que yo vea que está mal, te lo voy a decir y lo voy a hacer de frente”, aseguró, dejando en claro su postura independiente.
Sin embargo, ha señalado que el actual esquema de votación dentro del concejo dificulta una verdadera fiscalización. “No podemos irnos a sentar a un Concejo Municipal donde se deben tomar decisiones en favor de la población solamente por intereses personales y levantar la mano sin tener un análisis cuidadoso”, advirtió.
Además, recalcó la falta de compromiso de autoridades electas, indicando que buscan un interés personal. “Cuando las campañas son muy grandes y cuando hay una inversión, las autoridades vienen a recuperar esa inversión”.
Mónica Giráldez sobre amedrentamiento
La regidora también denunció que, por su postura crítica, ha sido víctima de represalias por parte de la gestión municipal. “Desde el primer año fui víctima de atropellos. En una sesión de concejo (el primer regidor) me botó por no opinar igual y por oponerme al punto de agenda”, reveló.
Incluso afirmó que ha recibido amenazas directas por su labor fiscalizadora. Incluso denunció que una vez le dejaron basura en su vivienda, refiriéndose a presuntas acciones de amedrentamiento por parte de la administración municipal.
Uno de los temas que Giráldez ha criticado abiertamente es el manejo del presupuesto en la municipalidad de Abancay. “Yo respeto el carnaval, lo valoro, pero no podemos aprobar 233 mil soles cuando la ciudad está en un desorden increíble”, afirmó. Recordó los problemas urgentes como la falta de un adecuado sistema de recolección de basura y alcantarillado.
Además, acusó que dentro de la gestión se han aprobado partidas sin transparencia. Recalcó que actualmente, Abancay no cuentan con un relleno sanitario que tenga la capacidad de cubrir estas necesidades.
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Un llamado a la población y las autoridades
A pesar de las dificultades, Mónica Giráldez reafirmó su compromiso con la fiscalización y la transparencia. “Las autoridades que vengan tienen que entender que no deben venir a servirse del pueblo, sino a servir al pueblo”, enfatizó.
Las denuncias de la regidora han puesto en evidencia una serie de cuestionamientos sobre la gestión municipal en Abancay.
Nota: María Luisa Álvarez
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