Por: Iyari Gómez – Radio Estación Wari
El miembro del comité organizador de los Juegos Bolivarianos 2024, representación del Gobierno Regional de Ayacucho, Luis Daniel Atachao, se refirió a los significativos retrasos en la ejecución de las obras necesarias para el certamen deportivo.
En entrevista con el programa “Voces del Sur” de Estación Wari, el funcionario señaló que el Proyecto Especial Legado, encargado de la organización y ejecución de los juegos, ha asegurado que las obras estarán listas para noviembre, justo a tiempo para el inicio del evento. “Nos han informado que las obras llegan para noviembre y van a estar aptas para recibir a las delegaciones,” informó.
Alcalde de Huamanga resaltó el retraso
Sin embargo, estas afirmaciones contrastan con las recientes declaraciones del alcalde provincial de Huamanga, Juan Carlos Arango, quien a fines de junio expresó que no había avances significativos en la construcción de la Villa Bolivariana.
El alcalde mencionó que la entrega de las obras se haría en plazos, lo que sugiere que no estarán completamente terminadas para el inicio de los Juegos.
La inestabilidad dentro del Proyecto Especial Legado, por el que han pasado cinco directores en menos de seis meses, ha sido otro factor que suma a la incertidumbre. Atachao reconoció esta problemática y destacó que la decisión de dar la responsabilidad de los Juegos Bolivarianos a Legado fueron tomadas por las autoridades anteriores del gobierno. “Esta inestabilidad es preocupante, pero estamos vigilantes de todas las contrataciones e inversiones que realice Legado,” afirmó.
Capacidad hotelera
Ante la posibilidad de que las obras no se completen a tiempo, Atachao aseguró que existen planes de contingencia. “La capacidad hotelera de Ayacucho es suficiente para albergar a los deportistas y se han hecho evaluaciones para asegurar esto,” infirió.
Por otro lado, los padres de familia de las instituciones educativas Mariscal Cáceres y Nuestra Señora de las Mercedes, designadas para albergar algunas competencias, también han mostrado su inquietud.
Con el calendario escolar ajustado para cumplir con las horas lectivas antes de los Juegos Bolivarianos, los estudiantes se ven obligados a asistir a clases los sábados y renunciar a sus vacaciones de medio año. “Esta situación es perjudicial para los estudiantes, según han manifestado psicólogos y padres de familia”, comentó Atachao.
El Comité Organizador espera que el Proyecto Especial Legado presente una evaluación de los avances a fines de julio, lo que podría aclarar la situación. Sin embargo, hasta entonces, la incertidumbre persiste. “Nos han asegurado que la Villa Bolivariana y el Comedor Universitario estarán listos, pero necesitamos ver avances concretos. Estamos vigilantes y preparados para tomar decisiones basadas en la información que recibamos”, concluyó Atachao.