Por: Karol Macetas y María Luz Cruz de Radio Yaraví
La expresidenta del Congreso Mirtha Vásquez sostuvo una extensa entrevista telefónica con el programa Voces del Sur, en la edición de Arequipa, que se emite vía Radio Yaraví. En las siguientes líneas, la también expremier comenta los impactos y amenazas de la reciente reforma para el retorno al sistema de la bicameralidad.
¿La reforma sobre la bicameralidad es tan buena como lo pintan los congresistas; logrará solucionar los problemas que estamos viviendo?
Lo primero que quisiera decir es que el modelo bicameral fue eliminado por (Alberto) Fujimori. Lo hizo para acumular poder, controlar el Congreso, porque un Legislativo con una sola composición le permitía a su gobierno manejarlo y establecer condiciones que le favorecían. Hoy curiosamente el propio fujimorismo ha revertido esa decisión para afianzar su poder. Vuelven al modelo bicameral, no pensando en una mejora del sistema político.
La bicameralidad, en una situación de normalidad, ayuda a mejorar la calidad de la legislación, porque tienes dos cámaras: una que emite leyes y la otra que controla, haciendo contrapesos. Pero la manera como se ha aprobado, con las reglas que se han establecido y la intención de seguir acumulando poder, es pésima.
Hay una serie de trampas: se ha creado una cámara donde ellos mismos van a reelegirse. Y es un Senado con muchos poderes que prácticamente anula la capacidad de legislación de la Cámara de Diputados. Ahí está lo malo.
Esto ha generado indignación debido a que la ciudadanía rechazó la propuesta en el referéndum del 2018.
Hay un serio cuestionamiento porque una de las trampas y la causa principal de que se apruebe esta bicameralidad es que ellos querían una reelección y esto es una reelección encubierta. El tema de la edad ha sido eliminado para los que han sido congresistas. Es decir, si la ley dice que senadores solo pueden ser aquellos que tienen de 45 años para arriba, en el caso de que hayan sido legisladores este requisito no se requiere. Por eso tenemos la posibilidad de que gente como Cavero, Tudela, Barbarán o Tania Ramírez puedan postular al Senado, sin cumplir el mínimo de edad. Es terrible que gente que cumple un rol nefasto dentro del Congreso va a poder acceder a estos puestos.
Hay un punto en esta bicameralidad que dice que los candidatos a la presidencia o vicepresidencia de la República pueden ser simultáneamente candidatos a senador o diputado. Si en 2026, Keiko Fujimori es candidata a la presidencia, ¿también podría optar por ser senadora o diputada?
Sí, los candidatos a presidentes y vicepresidentes van a tener esa doble opción. Entonces Keiko Fujimori e incluso expresidentes podrían postularse sin ningún problema. Eso es crear una ventaja a su favor, asegurar que estarán dentro de estos cargos de poder.
Entre los cambios también se encuentra la eliminación de la cuestión de confianza obligatoria al gabinete ministerial, ¿qué piensa de ello?
Se ha eliminado esta figura porque cuando se negaba el voto de confianza a un gabinete, contaba para que el presidente tenga la facultad de cerrar el Congreso por el tema de la obstrucción. Lo han eliminado para evitar ese riesgo, ya no va a ser una oportunidad para que el Congreso sea cerrado. Se están cuidando mucho.
Dentro de estos cambios, también establecieron que lo único que puede ser cerrado por el presidente de la República, en un caso extremo, es la Cámara de Diputados, mas no la Cámara de Senadores. Y en todas estas trampas han incluido que van a ser 130 diputados y 60 senadores; pero hay un apartado que dice que, si quieren subir el número de senadores, solo se necesita un decreto. Quiere decir que cuando se les antoje van a poder aumentar el número. Hay que tener mucho cuidado, porque lo que tenemos ahora es una nueva Constitución que lo han hecho ellos, casi arrogándose la labor de una Asamblea Constituyente.
¿Qué otros impactos va a tener el Senado?
Prácticamente el Senado es el que decide todo. Cuando hay dos cámaras, la de Diputados es la que emite las leyes y el Senado hace una labor de control. Sin embargo, hay procedimientos en casi todos los sistemas por los que se establece cierto equilibrio. En este caso, el Senado tiene la última palabra. Si no quiere aprobar una ley o la quiere aprobar a su manera, ni siquiera tienen que consultar con la Cámara de Diputados, sino que tienen todo el poder absoluto como para sacar una ley, para eliminarla o modificarla. Casi la Cámara de Diputados ya no tiene razón de ser.
Son estas decisiones y otras que provocan la indignación entre la ciudadanía. Hemos escuchado que Alejandro Cavero y María del Carmen Alva señalan que el Poder Legislativo siempre ha sido impopular. Usted fue presidenta de la Mesa Directiva, ¿cómo se puede revertir esta situación?
A nivel internacional, los parlamentos siempre son cuestionados porque es la representación de esa diversidad de posiciones que existen y la población no siempre está satisfecha con un parlamento porque hay voces disímiles. Pero eso no se puede tomar como un pretexto para decir que todos son impopulares y entonces ¡qué nos importa! Es una actitud de completo cinismo, ironía, burla con la población. Creo que cada vez que la ciudadanía cuestiona más bien es un mensaje para mejorar. Pero estos congresistas se han vuelto tan caraduras que, cada vez que hay un cuestionamiento, dicen no importa porque todos somos impopulares, no nos interesa lo que diga la población.
Algunos congresistas decían: pero a qué le tienen miedo si al final va a depender del ciudadano. ¿Es cierto?
No es cierto, porque ellos han puesto las trampas en la ley como para asegurar que son las únicas opciones que tiene el ciudadano para votar. En principio, eliminaron las elecciones primarias, que permitía a los ciudadanos participar libremente en la elección de candidatos dentro de los partidos. Eso aseguraba que, al menos, la ciudadanía escoja a los candidatos que les parece mejor. Por lo tanto, los dueños de los partidos y las argollas van a elegir quiénes van en las en los primeros números en las listas y, tal como está la política, se rige en función a quien paga más.
Ahora, hay tanta dispersión. Van a competir por lo menos 30 partidos políticos. Hay porcentajes muy bajos de votación. Entonces estarán los que ganen por un porcentaje pequeño; ahora mismo tenemos congresistas que han sido electos con 5.000 votos y, aun así, están allí. No es una votación representativa, peor ahí están.
El caso Dina Boluarte
Producto del allanamiento a la vivienda de la presidenta Dina Boluarte, hemos escuchado un mensaje a la Nación. Pero es más que evidente que hay un contubernio, un vínculo muy estrecho entre ella y el Congreso. ¿Qué tendría que pasar para que ese vínculo se rompa?
Este es un pacto tácito entre Dina Boluarte y el Congreso porque a ambos les conviene permanecer en los cargos. A ella seguir al frente de la presidencia porque eso le asegura impunidad. No solo es el tema de este aparente enriquecimiento ilícito que ella misma lo ha mostrado de manera tan frívola, sino que tiene que responder por lo más grave que es la muerte de 70 peruanos.
Ella no quiere que nadie la persiga y sancione, por eso se va a agarrar con uñas y dientes de su sillón presidencial. El Congreso, por su lado, quiere permanecer hasta el 2026 porque tienen intereses subalternos: capturar instituciones del Estado, legislar a favor de las mafias y sus intereses particulares. Ahora les falta capturar los organismos electorales y esa es su apuesta.
¿Cree que es justificable que Dina Boluarte tenga esas joyas?, ¿le parece un tema banal?
A pesar que no es el tema más grave que ha cometido Dina Boluarte, porque sobre eso está el tema de las víctimas de las masacres; pero no por eso vamos a decir que esto es un tema menor. Es grave y evidencia que dentro de este gobierno hay una corrupción muy fuerte. Quienes hemos conocido a esta señora, estamos conscientes de que no tenía nada, incluso cuando era ministra no tenía esos signos de riqueza. ¿Qué está pasando? ¿Qué están negociando en el gobierno? Ella no pensaba que la iban a rastrear. Una persona no puede tener estos signos de riqueza en un tiempo tan corto.
¿En qué se diferencia el escenario actual con el que se tuvo en noviembre de 2020 y provocó la vacancia de Martín Vizcarra?
Martín Vizcarra fue vacado, desde mi punto de vista, por una cosa mucho menor. Lo único que salió eran investigaciones periodísticas que decían que había un testigo que nadie identificaba y que él había declarado que Martín Vizcarra había pedido dinero. Ni siquiera había una investigación fiscal abierta. Pero, lo que ahora tenemos es la prueba de un posible delito, esta mujer está llena de joyas, ni siquiera ha tenido el reparo de ocultarlas. Hay una investigación fiscal en curso, ella no sabe explicar y con las intervenciones que han hecho se prueba que esta mujer miente. Ella salió a decir que era una joya de antaño y lo que le han encontrado es la prueba de que uno de estos relojes ha sido adquirido recientemente. Sin embargo, ahora nadie habla de vacancia, dicen que el país se va a desestabilizar. ¿Ahora nos van a venir a decir que les interesa la estabilidad del país o las inversiones? ¡Por favor!