Mariela Cayo: Mi esposo Manuel Quilla solo exigía justicia, pero fue brutalmente atacado

Viuda de víctima de la represión, señaló que ha encontrado fortaleza en medio del dolor.

Mariela Cayo

Por: Leysel Flores

Mariela Cayo, esposa de Manuel Quilla Ticona, quien falleció en Lima durante las protestas contra el gobierno de Dina Boluarte, destacó la lucha incansable contra la impunidad y la fortaleza emocional frente a la pérdida de su ser querido.

Llamó a una reflexión nacional sobre derechos humanos y democracia. Mariela subrayó su compromiso de no descansar hasta encontrar justicia para su esposo y todas las víctimas de las protestas.

“Es lamentable que los responsables sigan libres”, expresó, mencionando a las autoridades implicadas. Según Cayo, Manuel fue víctima de represión policial el 14 de marzo en la avenida Garcilaso de la Vega, en Lima donde recibió golpes mientras se manifestaba pacíficamente.

Al día siguiente, en estado inconsciente, fue detenido y llevado a la comisaría, donde habría sido torturado. “Mi esposo solo exigía justicia, pero fue brutalmente atacado. No podemos permitir que estos hechos queden impunes”, afirmó a través de Voces del Sur de la Red Micaelas.

Transformaron el dolor en determinación

En segundo lugar, Cayo enfatizó la fortaleza que ha encontrado en medio del dolor, tanto para continuar la lucha como para criar a sus hijos. “Mi esposo era una persona solidaria y empática, y su memoria nos impulsa a seguir adelante. Mis hijos y yo hemos transformado este dolor en determinación“, señaló.

Finalmente, Mariela hizo un llamado a reflexionar sobre los valores democráticos y los derechos humanos en el Perú. “Vivimos en un país donde levantar la voz se criminaliza, donde el racismo y el clasismo siguen presentes. Esto no es democracia”, denunció.

En su relato, también recordó declaraciones polémicas de autoridades que, según ella, reflejan una falta de sensibilidad y respeto hacia las víctimas. “No descansaré hasta que el Perú sea un país donde no te disparen por protestar, donde no se tolere la injusticia”, concluyó.