Siete vidas apagadas en Apurímac: ¿cuánto tiempo más para lograr justicia?

El abogado Juan José Quispe, de IDL, detalla el lento avance de las investigaciones y las trabas para alcanzar justicia en Apurímac.

Apurímac, protestas contra Dina Boluarte

El 11 de diciembre se cumplieron dos años desde la muerte de Beckham Romario Quispe, un joven de 18 años que fue la primera víctima registrada en Apurímac. Junto a él, otras seis personas fueron asesinadas en el contexto de las protestas sociales. El abogado del Instituto de Defensa Legal (IDL), Juan José Quispe, en una entrevista a Voces del Sur de radio Titanka (Apurímac), explica que las investigaciones se dividen en dos casos principales:

“En Apurímac hay dos investigaciones: uno por los siete ejecutados, como nosotros lo decimos. Otro contra altos mandos de la Policía, por torturas agravadas en agravio de manifestantes”

El primer caso, que incluye a las víctimas fallecidas, está en la etapa de investigación preparatoria. Según Quispe, “culminada esta etapa, el fiscal debe emitir un dictamen: o acusa o archiva. Si acusa, se pasa a la etapa intermedia, control de acusación, y posteriormente al juicio oral”​.

Torturas y actos degradantes: el segundo caso en Apurímac

Además de los fallecidos, las investigaciones abarcan las graves violaciones a los Derechos Humanos sufridas por los manifestantes heridos. El abogado describe estos hechos como “actos inhumanos, humillantes, degradantes y discriminatorios”, que incluyeron golpizas y acusaciones infundadas de terrorismo:

“El ataque a dos camiones por parte de la Policía, que balearon a los manifestantes, no solo lesionó a personas, sino que se cometieron actos de tortura. Los tuvieron a la intemperie, donde el frío es fuerte, y los llamaron terroristas”​

Este caso está en etapa de investigación preliminar y aún falta esclarecer las responsabilidades de los agentes involucrados.

Obstáculos legales y trabas en el avance judicial

A pesar de los avances, el proceso enfrenta dificultades que ralentizan el acceso a la justicia. Quispe señala que el Código Procesal Penal no está diseñado para abordar casos complejos como este, donde hay múltiples acusados y pruebas:

“Estas investigaciones son bastante largas, porque los acusados plantean nulidades, recusaciones y nuevas pericias. El Código Procesal Penal está hecho para procesos rápidos, no para procesos complejos”​

Además, la falta de colaboración de la policía y las reprogramaciones de diligencias han contribuido al retraso. Sin embargo, Quispe se muestra optimista: “Yo sé que al final debemos encontrar justicia en estos casos”​.

También puedes ver:

Investigaciones paralelas contra altos funcionarios

El abogado también detalla una tercera investigación en la Fiscalía de la Nación, que involucra a altos funcionarios como Dina Boluarte y sus ministros. Este caso, basado en el artículo 99 de la Constitución, sigue un camino separado:

“La Fiscalía de la Nación ha emitido una segunda acusación constitucional que incluye a las demás víctimas y establece la vinculación de Boluarte y los ministros, por el delito de omisión impropia, asesinato y lesiones graves”​.

Aunque el camino hacia la justicia es lento, los familiares de las víctimas no pierden la esperanza. Quispe reconoce su frustración, pero recuerda que el proceso es intrincado: “Los familiares dicen: ‘dos años y no pasa nada’. Es entendible, pero en procesos complejos como este, los plazos son amplios”​.

Apurímac sigue siendo un símbolo de resistencia y dolor, mientras las investigaciones buscan esclarecer la verdad detrás de las muertes y torturas ocurridas durante las protestas. El compromiso con la memoria y la justicia es un llamado vigente para todo el país.

Aquí el programa completo:

*Foto de portada: AFP

Síguenos también en Facebook.