Beckham Romario Quispe Garfias creció en Andahuaylas, región Apurímac. Desde los seis años mostró un amor inquebrantable por el fútbol. Su padre, Dani Quispe, recordó: “Siempre le gustaba el fútbol, por eso yo le puse su nombre, Beckham. Cuando tenía 10 años ya jugaba con mayores y soñaba con llegar a grandes equipos”, sentidas palabras vertidas durante el programa Voces del Sur de radio Taki, de Huancavelica.
A los 16 años, Beckham jugaba en ligas importantes, llegando a representar a su región en competencias fuera de Apurímac, como Lima y Ayacucho. Además, ayudaba económicamente a su familia con lo que ganaba en los partidos. Sin embargo, sus sueños de ser futbolista profesional y estudiar medicina se truncaron en las protestas de diciembre de 2022.
La trágica tarde que marcó Apurímac
El 11 de diciembre de 2022, Beckham regresaba a casa tras un entrenamiento, cuando se vio en medio de los enfrentamientos en el aeropuerto de Andahuaylas. Su padre relató que en ese lugar, los francotiradores disparaban desde lo alto. Este hecho lo convirtió en una de las primeras víctimas de la represión estatal durante las protestas contra el gobierno de Dina Boluarte.
Dani Quispe, junto a otros familiares de víctimas, ha recorrido diversas regiones del país en busca de justicia. Según cuenta, el apoyo recibido proviene mayormente de ONG’s como la Asociación Pro Derechos Humanos (APRODEH) y de organizaciones internacionales.
Además, el padre de la víctima recalcó que por parte del Estado no hay ningún apoyo, pero gracias a Amnistía Internacional y APRODEH siguen adelante.
El padre también expresó su indignación por las constantes descalificaciones hacia las víctimas y las causas de los fallecimientos.
“Hasta ahora no hay justicia para mi hijo”
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Un llamado a la memoria y al reconocimiento
La hermana del joven futbolista pidió que su hermano sea recordado como el joven deportista que era. “Quisiera que mi hermano sea declarado héroe nacional y sea recordado, no como un delincuente, sino como un deportista que siempre ha soñado”, expresó conmovida.
A dos años de los trágicos sucesos, las familias de Apurímac y otras regiones como Ayacucho, Cusco y Puno siguen exigiendo justicia. Además, esperan medidas concretas por parte del Estado para esclarecer las muertes ocurridas durante las protestas.
El caso de Beckham Romario Quispe es un reflejo de las profundas heridas que dejó la represión en Apurímac y en todo el Perú. Su historia simboliza los sueños truncados de una juventud que buscaba un futuro mejor, pero que encontró violencia en lugar de oportunidades.
*Foto de portada: Infobae
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