Por: Deysi Pari
Fotos: Cortesía de Carlos Enrique Lopez Ponce de León
“El retablo de mi protesta”, el documental que recoge los testimonios de los familiares de las víctimas de la masacre del 15 de diciembre de Ayacucho, será estrenado este domingo, al cumplirse dos años de estos hechos suscitados en inmediaciones del aeropuerto, durante las protestas contra el gobierno de Dina Boluarte y el Congreso.
Fidel De la Cruz, director del documental, dialogó con la Red Micaelas y detalló que esta obra audiovisual se estructura en torno a los recuerdos y relatos de los familiares de las víctimas.
Con valentía, los familiares comparten sus experiencias y reflexiones sobre la pérdida de sus seres queridos, producto de la reacción descontrolada de las fuerzas militares.
Uno de los hilos conductores del documental es el retablista ayacuchano Edilberto Jiménez, reconocido por sus retablos en los años 80. Este artista popular regresó a Huamanga para crear dos obras en base al testimonio de los familiares.
“Él (Jiménez) tiene que entrevistar y de su mano conocemos quiénes han sido las víctimas y la ausencia que dejaron”, dijo el director De la Cruz. Uno de los retablos fue enviado a Japón y el otro se encuentra en Lima.
Víctimas no participaban en protestas
El proyecto audiovisual no solo refleja el sufrimiento de las familias, sino que también subraya la cruel realidad de que muchas de las víctimas no estaban involucradas en las protestas.
Una de ellas es la historia de Christopher Ramos Ayme, un joven de 15 años que fue asesinado al salir del cementerio, donde cumplía tareas de limpieza de los nichos, a solo unas cuadras del aeropuerto de Ayacucho. Es uno de los casos más emblemáticos del documental.
“Ha sido insano lo que nos hicieron. Lo que nos hicieron no tiene nombre. Ha muerto gente que no estaba participando en la protesta, que volvía a su casa. Usaron más de 1200 balas”, reflexiona De la Cruz.
Un trabajo en equipo
El documental también cuenta conla colaboración de otros artistas como Reynaldo Quispe, un joven retablista ayacuchano que se unió al proyecto y creó otro retablo. Precisamente su obra es la imagen con la que se cierra el documental.
Al proceso de creación se unieron músicos como Carlos Falconí y Edwin Churata, quienes expresan a través de la música el dolor y la resistencia de las víctimas. Además, participan otros artistas visuales y poetas, como Felipe López y Carmen Aroni.
Este trabajo colectivo, que integra diversos lenguajes artísticos, tiene un objetivo claro: dar voz a aquellos que aún buscan justicia. A través de los testimonios y la creación artística, el documental no solo busca visibilizar los hechos, sino también proporcionar fuerza a las familias para que sigan luchando por la justicia que aún no llega.
Documental dura 78 minutos
El documental, que se estrenará el 15 de diciembre de 2024, tiene una duración de 78 minutos y está estructurado con el objetivo de narrar una historia de lucha, resistencia y memoria colectiva.
El estreno se enmarca dentro de las actividades organizadas por la Asociación de Familiares de los Asesinados y Heridos del 15 de diciembre de 2022 (ASFAH). Ellos llevarán a cabo una serie de actos conmemorativos, entre ellos una misa, una romería y la proyección del documental en el cine teatro municipal de Ayacucho.
El trabajo ha sido posible gracias al esfuerzo colectivo de un equipo de documentalistas y artistas que han trabajado en silencio, incluyendo a Joseph Araujo, Álvaro Jeri, Bryan Vega, Coki Solier y Sharmeli Bustíos, con el apoyo fundamental de Luis Cintora, editor español que contribuyó a la edición final. Además, Caroline Pelikan radicada en Francia, colabora con la difusión del documental.
“El retablo de mi protesta” es un recordatorio de que, aún hoy, las heridas de Ayacucho siguen abiertas, pero también es un homenaje a la valentía de quienes, a través de sus testimonios y su arte, siguen luchando por que la verdad y la justicia prevalezcan.
